El pasado mes de mayo sufrimos toda la oposición un nuevo intento de boicot y censura por parte de la Alcaldesa, quien prohibío a los concejales del gobierno contestar en el Pleno mismo las preguntas y ruegos que le hacen los concejales de la oposición. Un hecho que disparó todas las alarmas y que la Alcaldesa justificó en que "lo hizo para evitar que los Plenos duren tanto". Una excusa fuera de lugar y sin sentido, pues es su trabajo dar la cara a los vecinos respecto a su gestión. Los Plenos del Ayuntamiento duran de media unas 3 horas, y en algunos casos han durado incluso 5 horas.
Debido a la mala excusa de la Alcaldesa, todos los partidos que forman parte de la oposición, decidimos no tramitar propuestas ni ruegos ni preguntas para el mes de Junio. Como resultado, la Alcaldesa quedó en evidencia pues únicamente duró el Pleno 12 minutos exactos.
Esto significa que más del 90% de los contenidos de los Plenos son gracias a la oposición, que eleva mensualmente entre 5 y 10 propuestas de resolución, además de emplazar las quejas y sugerencias de los vecinos a los problemas del día a día que hay en Llucmajor, s'Arenal, las Urbanizaciones y Foravila. Si la oposición no aporta ideas, el gobierno no hace nada.
Para colmo del ridículo, la Alcaldesa demostró frente a las cámaras de la televisión autonómica y diversos periodistas, el completo desconocimiento del funcionamiento legal del Pleno, pues se olvidó que para aprobar la inclusión de facturas extrajudiciales por vía urgente necesita 11 votos a favor. Y que con la dimisión de otro concejal de su gobierno, ahora tienen 10 votos. Por eso, desde la oposición le tumbamos la moción de urgencia de unos pagos que no habían pasado el cauce normal esperado.
Pero aún hay más, en este Pleno por imperativo legal, se debía dar cuenta a todos los concejales de la tercera dimisión oficial de un concejal del gobierno. La Alcaldesa se saltó el punto, mandó callar a la oposición diciendo que "ella trabaja" y cerró el Pleno antes de tiempo. Por tanto, no se hizo efectiva la dimisión de dicho concejal ante el Pleno, y su sustituto sufrirá un retraso que puede ser de hasta 1 o 2 meses más a la hora de jurar el cargo. Un nuevo ejemplo de que pese a que la Alcaldesa lleva desde el año 2011 en el Ayuntamiento, desconoce aún elementos básicos y fundamentales que todo concejal debe saber.
Si la Alcaldesa quería demostrar que no está a la altura del cargo que ostenta, en el último Pleno lo ha demostrado por los reiterados fallos que cometió frente a los medios de comunicación: traspapelar puntos del orden del día ocasionando retrasos administrativos, no saber sumar los votos para aprobar facturas extrajudiciales, desconocer totalmente normas básicas del Pleno que desde 2011, año que entró al Ayuntamiento, ya debería saber, y que lleva 3 dimisiones de concejales del gobierno en apenas 12 meses. Los vecinos no nos merecemos un gobierno tan ineficiente. ¿Cómo esperan gobernar el Ayuntamiento si no saben gobernarse a si mismos?
Palabras de Alexandro Gaffar, portavoz de LLIBERTAT LLUCMAJOR.